Mike Patton, el líder de Faith No More, nos acostumbró a ese sonido elegante y glam que supo ponerle a la “voz” de su banda; entre otros muchísimos temas-ejemplo de estas afirmaciones, está “Last cup of sorrow”, del disco “Album of the year” (1997). Es, también, una de las voces más personales del rock (y versátil, ni qué hablar).
Con estos antecedentes, la información que lanzó ayer se convierte en un notición, de aquí a la China. Es que Patton y el baterista de Slayer, Dave Lombardo, están en proceso de armar una “superbanda” de metal.
El datazo lo escribió el propio Mike en su muro de Facebook, donde además contó que el grupo ya tiene nombre, Dead Cross, y lanzará su disco en 2017: qué estupendo que aún los músicos piensen sus proyectos como un concepto que luego se vuelve disco; bueno sería que sus audiencias buscaran lo mismo… pero, no: Spotify, y la escucha por tracks, han derrotado a la obra.
Vamos a los apuntes técnicos: Patton (48) posee un rango vocal de seis octavas, uno de los más amplios que puede tener cualquier cantante, incluso en la ópera. Así las cosas, los agudos que estará preparando para Dead Cross suponen toda una osada esperanza.
Faith No More, con su hard rock y elementos de funk y hip-hop, estuvo a la vanguardia del boom de la música alternativa a finales de la década de 1980 y reapareció en 2015 con su primer álbum en casi dos décadas.
Es una banda que desde sus inicios llevó la marca de la bohemia exquisita de San Francisco, su lugar de origen. Y supo conjugar con maestría el cruce entre la música y el audiovisual. De hecho, el tema que mencionamos -“Last cup of sorrow”- se convirtió también en un formidable homenaje a la poética visual deAlfred Hitchcock en su película “Vértigo”.
El clip, dirigido por Joseph Khan (un crédito de la industria que ha trabajado también para Britney Spears, Shakira, U2 o Muse entre otros) está protagonizado por la bella rubia Jennifer Jason Leign; hija de la musa de Alfred en “Psicosis”, Janet Leigh.
El cubano Dave Lombardo, en tanto, se ha ganado ya su lugar como figura, en el podio de los mejores bateristas del metal. Y, además de ponerle el pulso motor a Slayer, ha tocado con Suicidal Tendencies y Misfits.
No es la primera vez que Lombardo y Patton unen fuerzas para aportarle al género. Son parte de Fantômas, integrado también por Buzz Osborne y Trevor Dunn, con el que editaron sus sonidos noise y feak metal en seis discos, entre ellos: “Suspended Animation” y “Delirium Cordia”.
Ambos estarán también en Dead Cross con el guitarrista Michael Crain y el bajista y vocalista Justin Pearson, que han tocado en Retox, una banda punk hardcore de San Diego.